Sin dudas que la renovación de Julián Velázquez es una buena noticia para Independiente. Más allá de las idas y vueltas que se generaron en las negociaciones para renovar con el club, hay varios puntos que son importantes y vale la pena mencionarlos.
Desde el aspecto deportivo, que si recupera su nivel, es un refuerzo de jerarquía. Más allá de que las apariciones de Néstor Breitenbruch y Nicolás Figal presentan variantes en la defensa, es un nombre importante si está en plenitud. Lo demostró en muchos partidos con la camiseta roja.
Está claro que hubo un antes y un después en la vida de Julián Velázquez. De gran nivel hasta su venta al Génoa y en su regreso, no sólo nunca volvió a ser el mismo, sino que sufrió la ruptura de los ligamentos. La cual le demandó estar mucho tiempo alejado de las canchas.
Sin dudas que arranca desde atrás. Deberá ganarse nuevamente su lugar en el equipo y demostrar que puede volver a ser quien fue.
Y desde el aspecto institucional, hagamos memoria. Recordemos que con la dirigencia anterior, quedaron libres jugadores que nacieron en las inferiores del club y que por decisión de la Comisión Directiva que presidía Javier Cantero, se fueron a jugar a otros clubes. Y ante una posible venta en el futuro, ingresará dinero a las arcas del club.
El tiempo le dará revancha al correntino. Es tiempo de mirar hacia adelante y volver a ponerse a punto para la alta competencia. Una buena noticia para todos. Para la dirigencia, para el cuerpo técnico y también para el jugador.
