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Se hace fuerte en casa

En la historia de la Copa Sudamericana, Independiente debió jugar, hasta el momento, ocho llaves contra equipos argentinos. De ellas, el Rojo ganó seis, y perdió tan sólo dos.

Muchas veces se dice que es peor enfrentar a un equipo del mismo país que del extranjero, pero parece que a Independiente le sientan bien los rivales argentinosDesde la primera Sudamericana que jugó hasta la actual, el Rojo enfrentó a ocho de ellos, de los cuales derrotó a seis y perdió, solamente, con dos. De la primera a la última, todos los rivales que le tocaron.

En la Copa Sudamericana de 2003, Independiente debutó contra Rosario Central. En aquella ocasión, ambos igualaron 1-1 en Avellaneda y, en Rosario, fue triunfo para el Rojo por 1-0, lo que le permitió pasar de ronda por un global de 2-1. Sin embargo, en la fase siguiente, debió enfrentar a River, y la historia ya es conocida: Una derrota 4-1 en la Doble Visera y otra 4-0 en el Monumental cerraron un 8-1 favorable al Millonario, y un decepcionante papel por parte del Rey de Copas.

Luego de 5 años, el Diablo volvió a jugar el certamen. En esta ocasión, el rival a batir fue Estudiantes. Luego de haber conseguido un 2-1 a favor en la cancha del vecino, Independiente perdía por el mismo resultado en La Plata y, sobre el final, Juan Pablo Pompei obvió un claro penal en el final a Lucas Pusineri que bien podría haber cambiado la historia. En los penales, la suerte le jugó a favor al Pincha.

En 2010, contra el último campeón argentino. El Rojo debutaba en la Copa ante Argentinos, que venía de ganar el Torneo Clausura de ese año. Sin embargo, la chapa de campeón no les sirvió mucho, ya que los de Avellaneda los despacharon con un 1-0 en el Libertadores de América y un 1-1 en La Paternal.

Dos años después, enfrentó a Boca. En el partido de ida, jugado en la Bombonera, Independiente logró arrancarle un empate 3-3 al, por entonces, último subcampeón de la Copa Libertadores. Luego, en Avellaneda, igualaron 0-0 y el Xeneize se despidió del certamen por gol de visitante.

En 2015, le tocó a Arsenal. Bajo la dirección técnica de Mauricio Pellegrino, Independiente logró sacar un empate 1-1 en el Viaducto y, en el Libertadores de América, fue triunfo por 1-0 para el local.

Con Gabriel Milito en el banco, el Rojo eliminó a Lanús. En una llave que parecía que se iba a decantar para el Granate (que venía de salir campeón del torneo local por 4-0 ante San Lorenzo), el Rey de Copas pisó fuerte en la Fortaleza y lo derrotó por 2-0. Luego, en casa, el Diablo se impuso 1-0. ¿Quién hizo el gol? Si, Martín Benítez.

Finalmente, con Atlético Tucumán. Con la bronca por lo sucedido en relación a la Copa Libertadores 2017, de la cual el Decano se fue en fase de grupos y por eso pasó a jugar la Sudamericana, Independiente se dispuso a enfrentarlo. En Tucumán fue 1-0 para el local, con una actuación pésima por parte de los dirigidos por Ariel Holan. Sin embargo, en Avellaneda, el Rey de Copas dio una lección de cómo se juegan los partidos de Copa y, con sendos tantos de Leandro Fernández y Martín Benítez, dio vuelta la serie y pasó a Cuartos de Final.

De esta forma, Independiente se convirtió en un rival temido por los equipos argentinos en la Copa Sudamericana y, si llega a pasar a semifinales, el rival puede llegar a ser el eterno rival. ¿Historia cantada?

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