Independiente luchó y aguantó mucho para ganarle a Defensa y Justicia 1-0 en el Libertadores de América. El gol lo marcó Martín Benítez que ya suma cinco en el torneo. Mauricio Pellegrino sigue haciendo historia, se dio el debut del Cebolla Rodríguez y la gente se fue muy ilusionada. Hoy, el Rojo, está a cinco unidades de la punta. ¿Quién te quita la ilusión?
No fue un buen partido. Quizás fue el peor rendimiento desde que Mauricio Pellegrino se hizo cargo del plantel, aunque el triunfo permite trabajar con la cabeza tranquila para mejorar y seguir con esa sensación trascendental de ser un equipo acostumbrado a ganar.
Ya desde el primer minuto Defensa y Justicia demostró tener armas para dañar. Encontró espacios en la defensa del Rojo, dañó con la habilidad de Ciro Rius y la movilidad del equipo entero en ataque. A favor de Independiente es que pecó de inocente a la hora de definir y su falta de contundencia fueron clave para el equipo de Pellegrino.
En el local, Jesús Méndez fue el mejor. Cuando podía tener la pelota en sus pies hacía jugar al equipo y cuando había que recuperarla corría a todos. Es más, tras varias jugadas en las que Defensa no marcó la diferencia en el marcador ya sea por falencias a la hora de rematar o por la intervención de Diego Rodríguez, fue Méndez el que encontró el camino del triunfo.
El volante se sumó a la presión en ataque, cortó la salida del Halcón y la pelota derivó en Martín Benítez quien continúa en una racha más que importante. El Misio encaró hacia al arco y, ante la pronta salida del arquero, detuvo su marcha, lo eludió y definió para estampar el 1-0, que al final sería el gol del triunfo.
Se jugaban justo 30 minutos de partido. Independiente aprovechó el envión de la diferencia a su favor e intentó mejorar. Defensa sintió el golpe y se notó. Sin embargo, sobre el final de la etapa inicial otra vez el visitante mejoró.
El segundo tiempo acrecentó lo visto. Independiente, que no hacía pie y no podía desarrollar su juego, se acomodó un paso atrás y fue el Halcón el que tenía la responsabilidad de ir a buscar el empate. De a poco, el conjunto visitante volvió a encontrar su mejor forma, dañando con la pelota parada y hallando espacios en la defensa del Rojo.
Así fue que el Ruso tuvo que vestirse de salvador para mantener su arco en cero en algunas situaciones. La defensa tuvo mucho trabajo y también mostró algunas falencias. Los volantes defendían cerca de la zaga y los delanteros, para armar una contra tenían que recorrer mucho espacio para poder dañar.
Lucas Albertengo, en una pelota parada, ganó en lo más alto dentro del área de Arias, pero se encontró con el travesaño como escollo para volver a marcar. Diego Vera también tuvo un despliegue importante. No obstante, no contaron con chances concretas para liquidar el juego.
Pellegrino, en su afán de corregir la situación metió mano en el equipo. Debutó el Cebolla Rodríguez, también ingresó Jorge Ortiz y sobre el final Claudio Aquino. Claramente, para el DT del Rojo la mayor inconsistencia se veía en el mediocampo o quiso sumar piezas en ese sector para poder defender más lejos del área del Ruso.
En fin, Independiente sufrió y vio amenazada su victoria, pero pudo sortear la situación gracias a la falta de contundencia de Defensa, a las intervenciones del Ruso y al sacrificio de todo el equipo. Algo que la gente aprobó con aplausos y con un griterío infernal. Es que de a poco el Rojo se mete en la conversación del torneo, de a poco sigue creciendo y de a poco puede lograr resurgir. Falta mucho, pero ganando, es el camino y el objetivo es no dejar de dar pasos hacia adelante. ¡Vamos Rojo!
