Andrés Silvera, poco habituado a las entrevistas, recordó sus dos pasos por el Club, los campeonatos, los goles y su salida poco clara. Hizo su descargo respecto de la intimación que presentara para cobrar una deuda y también se refirió a la actualidad del equipo: “El equipo tiene sus momentos y por suerte, tiene a Mancuello en un gran momento”.
Andrés Silvera es, sin dudas, uno de los mejores jugadores que pasaron por Independiente en este nuevo siglo. Goleador del campeonato 2002 y partícipe de la Copa Sudamericana en 2010, es uno de los más queridos por los hinchas. Poco habituado a las entrevistas, el exdelantero se permitió charlar con De la Cuna al Infierno y tocó diversos temas.
Consultado por la intimación y el embargo presentado en 2012 (NdeR: el reclamo fue por $ 1.457.599,33 en concepto de deuda e intereses punitorios), el delantero respondió sin evasivas: “Yo estaba molesto, por la forma en la que me tocó irme del Club, pero quizás esas cosas la gente no las sabe o no las entiende. Yo quería quedarme, después de la Sudamericana, irme me pareció una boludez”.
“Me terminé yendo por 30 mil pesos, que eran de impuestos. Yo le dije a Mohamed que no escuchara boludeces, porque alguien le había dicho que yo me quería ir. Fui claro y le dije que me quería quedar, el propio Comparada me llamó y me agradeció, pero a los 2 días llamó a mi representante y le dijo que no iba a seguir. Me pareció increíble”, agregó.
Silvera reveló, además, que llegó a prestarle dinero al Club: “Le presté casi 40 mil dólares a Ducatenzeiler, para que el Club pueda solucionar una deuda con la Comisión de Actividades Infantiles y con Unión y yo pueda jugar. Eso no lo hace cualquier jugador, yo desde que llegué sentí un cariño especial por Independiente, pese a que en el principio me fue mal. Después de Ducatenzeiler llegó Comparada, que fue el que terminó de fundirnos”.
Silvera analizó brevemente la actualidad de Independiente: “Lo sigo. El equipo por momentos juega bien, en algunos otros momentos no tanto, pero por suerte tiene a Mancuello que hoy está pasando un momento bárbaro. Me pone contento con él , porque lo aprecio mucho. Quizás ahora tiene la continuidad que antes no tenía, incluso en Belgrano. Él ahora pisa el área y eso le deja llegar al gol. Me pone muy contento”.
Consultado por otros dos excompañeros, añadió: “Quizás el Rolfi bajó su rendimiento respecto al torneo anterior. Los motivos por los cuales Insúa no juega, no sabría decir porque son. Eso habría que preguntárselo a él o al DT”. También explicó los motivos de su ausencia en el partido homenaje a Gabriel Milito: “Justo para ese momento, mi viejo tuvo un ACV y tuve que viajar al sur, para ver como evolucionaba y estar cerca de la familia”.
Por último, recordó el campeonato obtenido en el 2002: “Fue fundamental la confianza que nos dio Gallego. Yo estuve a punto de irme y él me dijo que me quería para el equipo y yo pude responderle a esa confianza. ‘Quedate, te banco, te quiero y te quiero como titular’, me dijo en esa pretemporada. Se armó un equipo bárbaro, con partidos que ganamos 7 a 0, dónde arriba estábamos muy finos y la defensa estaba muy firme”.
