En la previa al encuentro ante Banfield, el técnico Omar De Felippe algunos futbolistas como el delantero Sebastián Penco ya anunciaron que el empate podría no ser negativo. Aunque sea ante el puntero y en su casa, ¿le alcanza a Independiente empatar contra el Taladro?
Hace una rueda, cuanto el Rojo recibía al entonces también equipo mas en forma del campeonato, se empató pero quedó una buena sensación. Independiente jugó, discutiblemente, el mejor primer tiempo del torneo y una de las mejores actuaciones de lo que va de la B Nacional. Sólo un error de Gabriel Vallés posibilitó el gol de Andrés Chavez y un sin sabor en el entretiempo. Luego, Samuél Cáceres empujó un remate de Daniel Montenegro para la igualdad. Cualquiera de los dos podría haber ganado, pero dio la sensación de que todo el mundo pensaba que Banfield golearía en el Libertadores de América y no fue así. El Rojo se plantó, fue el protagonista y levantó el nivel. No es casualidad que, luego de eso, llegó la levantada que dejó al equipo en puestos de ascenso luego de la última fecha del 2013 y hasta hoy.
Pero ahora la situación es distinta. Los de De Felippe también vienen mal, pero no pueden resignar mas puntos: tienen a tres rivales directos, Atlético Tucumán, Independiente RIvadavia y Crucero del Norte, al acecho para tomar el tercer puesto este fin de semana. Aunque sea contra el lider en su estadio, el Rojo debe aprovechar que estos también vienen con un presente irregular y están sin su goleador y dar el golpe. No hay otro resultado posible. El empate sirve para sumar, pero no para garantizar nada. El equipo debe sostenerse en los primeros puestos por mérito propio y no por lo que hagan o dejen de hacer los demás.
