La dupla central de Independiente durante los últimos encuentros del Torneo fue compuesta por un juvenil y un veterano. Cristian Tula y Sergio Ojeda dialogaron con la prensa apenas terminado el partido y con gran emoción recordaron el pasado que los catapultó a este presente.
Al igual que en el final del partido contra San Lorenzo, que inició la peor pesadilla para el Rojo, a Cristian Tula, defensor y sub-capitán de este equipo, se lo vio desbordado en llanto y emoción.
“Es algo que siempre quisimos lograr, lamentablemente, a veces por las cosas que nos ha tocado vivir luchamos contra todo. Nosotros solos sabemos lo que hemos sufrido. Todos nos daban por muerto, ya estábamos metidos en un cajón, pero a los equipos grandes nunca hay que darlos por terminados”, dijo el experimentado central, hilando las palabras lentamente.
También Tula recordó: “Yo en su momento dije que quería ascender así y me mataron por todos lados. Conozco lo que es la B Nacional y gracias a Dios, que nos dio una vida más, pudimos lograrlo”
Además dejó entrever una intimidad del vestuario que motivó a todo el equipo: “Ayer vivimos con el plantel algo que nos convenció de que este partido tenía que ser nuestro. Siempre se le sacó méritos a Independiente, pero teníamos que mantener la calma y no hacer otra cosa que no sea dejar a Independiente en Primera”.
Por su parte, el juvenil Ojeda explicó casi sin voz: “Estábamos mentalizados, porque el fin de semana dejamos pasar una oportunidad en nuestra casa, delante de toda nuestra gente. Creo que la mentalidad que teníamos hizo que quisiéramos salir a comernos la cancha y por ahí no tuvimos la pelota, pero se hizo un gran partido”.
Finalmente, el Bocha rememoró sus vivencias en el club y demostró la clave para amarlo incondicionalmente: “Los juveniles del club sufrimos desde la pensión, vivíamos ahí y era difícil, no había ni comida, pero eso hace que queramos más a la camiseta. Esas cosas te enseñan a valorar más al club, al sacrificio que se hace, el amor de toda esta gente y es algo de lo que voy a estar agradecido de por vida”.
El futuro de esta dupla depende exclusivamente del club. A decir verdad en reiterados partidos cometieron fallas garrafales, pero en este encuentro contra Huracán se mostraron firmes y con hambre de ascenso.
