Después de una dura falta cerca de la mitad de la cancha, Cristian Tula, vio la tarjeta roja a los 62 minutos de partido. El árbitro, Pablo Lunati, no dudó en expulsar al defensor que dejó con diez jugadores a un equipo que, incluso con once, ya estaba extremadamente descompensado.
Tula no comenzó mal el encuentro, pero se mimetizarse con el resto de la línea de fondo, que como ya es costumbre, no brinda seguridad bajo ningún concepto. Estuvo muy cerca de cometer tres penales y, en un intento por despejar un centro atrás, casi la clava al ángulo de Rodríguez. Con el correr de los minutos y el trámite del partido, el central disputó al límite cada pelota, lo que derivó en un foul muy brusco a destiempo sobre Nicolás Sánchez que encaraba a gran velocidad.
Es la segunda roja que recibe en lo que va del torneo (anterior contra Brown de Adrogué) y hace ya incontables partidos no rinde como debería, cometiendo errores garrafales.
Las descompensaciones defensivas de un equipo poco identificado con la historia de Independiente, no dejan de sorprender, básicamente porque partido tras partido pueden desprenderse numerosos fallos irremediables.
De cara al próximo encuentro, y con Velázquez lesionado, quedará saber si el técnico indulta a Morel Rodríguez u opta por Ojeda y Cáceres.