El Rojo tiene que viajar a Santa Fe con todo para golpear la mesa de la Zona 2. ¡Mirá!
Fue una goleada sin atenuantes. Independiente le ganó 4-1 a Fénix y no dejó dudas en el partido de ida de los Octavos de final de la Copa Sudamericana. No sólo por el resultado, sino porque el grupo estuvo por encima de la media hasta que el partido fue partido.
Esta diferencia sustancial pone al encuentro ante Colón como objetivo principal, corriendo a un costado la vuelta del próximo miércoles ante los uruguayos. No es para despreciar el cotejo de la semana entrante contra el Ave, pero claramente los cañones apuntarán a rematar la Zona 2 de la Copa Diego Armando Maradona.
El mix o el alternativo puede aparecer tranquilamente contra Fénix, además teniendo en cuenta que Conmebol permite 5 cambios y se puede especular en caso de que la mano venga torcida.
Pese a que no podrá estar Sebastián Sosa, porque se resintió de la lesión, y atajará Milton Álvarez, el del sábado es un partido para que Lucas Pusineri vuelva a poner a todos los titulares. El Rojo necesita hilar victorias, pero también hilar rendimientos, solidificarse en cada línea, demostrar que no fue producto de la casualidad o un arrebato como aquel 5-0 ante Rosario Central.
El DT tiene el escenario ideal para volver a plantar el mejor once que tiene a disposición y hacerle frente al Sabalero, que es el líder del grupo. Un triunfo depositará automáticamente a Independiente en la Fase Campeonato, cumpliendo con las expectativas planteadas hace dos meses atrás. ¡A por todo, con todo!
