Independiente se juega la vida con Arsenal, tal como lo hizo en 2002 cuando le dio vuelta un 2-0.
Hay partidos que marcan a un equipo, y probablemente el que lo haya hecho con Independiente en el Apertura 2002 fue el triunfo 3-2 contra Arsenal. Aquella noche, en la Doble Visera, el Rojo caía 2-0 con goles de Javier Morales y Silvio González, y el panorama parecía más oscuro que el propio cielo que ya no gozaba de la luz del día.
Sin embargo, los futbolistas dieron una muestra de carácter y revirtieron aquel encuentro. El primero fue de Lucas Pusineri, quien descontó luego de un pase bochinesco de Andrés Silvera. Luego Federico Insúa, quien justamente hoy cumple 41 años, estampó la igualdad desde los doce pasos tras una clara infracción sobre Pablo Guiñazú. Finalmente, el Cuqui marcó el tercero para el triunfo del Rey de Copas y el delirio de una hinchada que cada vez se ilusionaba más con el torneo.
Si bien aquel equipo que supo dirigir Américo Gallego era una máquina, tuvo partidos donde el rival le complicó los trámites, y supo poner actitud para revertir el marcador como contra los de Sarandí. ¡Triunfazo!
