José Omar Pastoriza se fue con toda su sabiduría a jugar al paraíso hace ya una década y en Independiente lo seguimos extrañando. Con 61 años, en el 2004, falleció por una afección cardíaca.
La vida pasa rápido suelen decir los abuelos. Y, hay que darle algo de razón. Ya hace 10 años que el Pato se fue de su vida terrenal para ir a dirigir un combinado de estrellas. El 2 de Agosto de 2004 apareció muerto en un departamento en Puerto Madero. Era, en aquel momento, el DT del plantel profesional de Independiente.
Sin dudas que fue, es y será parte de la rica historia del Rojo, aun cuando en algún momento vistió los colores del club vecino. Sí, el Pato primero probó en otra vereda, pero su verdadero y único amor estaba en Independiente, al que llegó en 1966 y nutrió su carrera tanto de futbolista como de entrenador.
Su cultura de compañerismo y respeto con sus dirigidos se forjó a puro asado y responsabilidad por llevar a lo más alto al más grande. Así fue que como jugador obtuvo tres títulos locales y uno internacional. Y, como DT, ganó tres en Argentina y tres cruzando la frontera.
Aunque tuvo muchos momentos históricos y recordados, su instante épico fue cuando en Córdoba en el Nacional 1977. El equipo estaba siendo literalmente “robado” por la terna arbitral y quería abandonar el campo de juego, cuando el Pato los detuvo y los obligó a jugar como hombres para quedarse con el título. Esa y mil hazañas más llevan su sello distintivo.
Fue el DT del equipo en 1984 cuando Independiente obtiene la séptima Copa Libertadores y lleva a cabo el “partido perfecto” en tierras brasileñas ante el Gremio de Porto Alegre, al que derrotó 1-0 con gol de Jorge Burruchaga. En la final Intercontinental siguiente, con gol de Mandinga Percudani, el conjunto del Pato le ganó por la mínima, en Japón, al Liverpool inglés.
En su último paso por Avellaneda se hizo cargo del equipo en 2004. Representando todo lo que fue y con ese cantito que se hizo himno logró convocar una nueva ilusión. Ni bien salió a la cancha sonó hasta la emoción: “Gracias Señor Pastoriza, por todo lo que nos da, esta hinchada le agradece, le agradece hasta el final”. Y sí, inclusive hoy, que el final ya se dio pero, como el amor es eterno, le queremos seguir agradeciendo.
