A través de Instagram, tanto el arquero como su pareja expusieron la forma en la que tratan al hijo, diagnosticado con TEA.
Son días difíciles para Rodrigo Rey, probablemente el referente más querido por los hinchas. El arquero no suele hablar mucho puertas afuera, pero si se muestra muy apegado a su familia, que consta tanto de Laura, su pareja, como de Benicio, su hijo. Tal es así que, ahora, expusieron la forma en la que tratan a su hijo en el colegio.
A través de Instagram, tanto el portero como Laura contaron lo sucedido en el Instituto José Manuel Estrada de City Bell. Luego de dos semanas sin haber ido a causa de una enfermedad, Benicio volvió a asistir. En un momento, el chico se cansó y necesitó un espacio de calma, a lo que le dieron una colchoneta para que se recueste. A causa de ello, se rehusó y pidió irse antes.
Esto, según cuentan, fue uno más de tantos destratos por parte del instituto. Por ello, a través de una historia, tanto Rey como Laura expresaron: “Esta imagen es el supuesto ‘espacio de calma’ de nuestro hijo en la escuela. Esta imagen describe lo que venimos renegando con esta escuela“. Y siguieron: “Una escuela privada, que cuenta con papás que han ofrecido todo. Apoyo de profesionales que van hasta la escuela para sugerir y ayudar a hacer un camino mejor por los niños que lo necesitan”.
La historia aclara que ellos no son los únicos que se quejan, sino que es algo general de todos los padres: “Hemos escuchado a otros papás en situaciones similares decir que cambiar a sus hijos de escuela quizás sea la solución, pero nosotros no. No vamos a permitir que le sigan faltando el respeto a nadie más“.
Más tarde fue Laura quien publicó otra historia, en la cual aclara la situación de Benicio: “Tuve un hijo que llegó al mundo sin esperanza de vida, que sobrevivió a dos cirugías recién nacido, quedando solo con 60 cm de intestino y un pronóstico desolador. Durante sus primeros cuatro años, durmió más en hospitales que en su propia casa. Su déficit inmunológico hace de sus inviernos un desafío”. Y agregó: “Todo ese contexto termina en un diagnóstico de TEA (Trastorno de Espectro Autista)“.
De esta manera, y a raíz del destrato sufrido por el propio Benicio, tanto Rodrigo Rey como su pareja volvieron a hacerse activos en las redes sociales para exponer los desmanejos del instituto.
