La hinchada de Independiente, en todo el estadio, colgó las banderas al revés y sólo se podía leer la de “Háganse cargo” demostrando su descontento con la realidad del plantel y los resultados.
En la semana pasaron un montón de cosas. Multas, perros colgados, predios dañados y hasta incendiados, sin seguridad y con un plantel que trabajó a puertas cerradas. La gente, día a tras día fue tomando bronca y sumado a los magros resultados y la falta de actitud del equipo mostró su descontento. ¿Cómo? Colocaron todas las banderas al revés y hubo silbidos, reprobaciones y muchos cánticos en contra.
“Nosotros alentamos, ustedes pongan huevo” se empezó a escuchar a los 15 minutos de juego. Luego, tras el penal que erró Daniel Montenegro sonó: “Si no ganan esta noche, qué quilombo se va a armar”, ya en un tono más amenazante. Iban 30 minutos de juego y la gente ya no aguantaba más la vergüenza. Y todavía faltaba lo peor.
En el entretiempo hubo mezcla de silbidos y aplausos. Lo cierto es que la reprobación fue muy grande y bajó de los cuatro costados. Es más, con la actuación en el complemento se escuchó: “Movete Rojo, movete, movete dejá de joder, esta hinchada está loca, hoy no podemos perder”.
Al rato hizo el gol Toranzo, Huracán comenzó a manejar el partido, Independiente se desesperó y la gente se pudrió. Volvieron los silbidos, sobre todo para Daniel Montenegro y Hernán Fredes. Inclusive Matías Pisano recibió el abucheo.
Así fue que de los pocos que se salvaron fue Federico Mancuello, que con mucha garra, espíritu y algo de fútbol fue de lo mejor de un equipo que sigue decepcionando a todos. La otra parte de aplausos fue cuando se dio el ingreso del Pocho Insúa en el segundo tiempo.
Con la derrota consumada, los insultos y los gestos de reprobación se mudaron al hall en el que luego hubo agresiones. La situación en Independiente cada día es peor y la inacción es la peor respuesta. Mientras, parece que los hinchas abrieron los ojos y ahora demuestran su bronca.
