Connect with us

Pelota de tiento

inferiores camiseta puma

En este espacio, habitualmente, se recuerdan los momentos más gratos de la historia de Independiente, pero esta vez cuando comenzaba redactar algunas líneas, surgió un extraño y desagradable imprevisto: once hombres sin piedad “prendieron fuego el archivo”. Así como a Julio Comparada les quitaron “las ganas de hacer el esfuerzo”, a este cronista le usurparon la pluma, libros, revistas y videos. Se acabó, el fuego lo consumió todo.

Siempre resulta gratificante conocer y reconocer a aquellos titanes que gestaron nuestra identidad. Por eso, semana tras semana se evoca con un poquito de nostalgia, pero con mucho orgullo, una goleada de décadas inmaculadas, un momento feliz, un instante de regocijo… Pero a las pocas horas, este plantel repite la goleada, sólo que los masacrados ahora somos nosotros. De repente las historias (doradas) de ese articulo en el que Erico metió cuatro goles, o aquellas otras en las que Bochini estuvo intratable, son mutiladas por manchones negros y erosionadas por el tiempo. Casi todo es gris ceniza.

Las páginas doradas ya nos quedan lejos, la tierrita que las cubre cada vez es mayor. El tenebroso presente oscureció los momentos más entrañables de nuestro Club. No es razonable que apellidos como Erico, De La Mata, Sastre, Bertoni, Bochini, Garnero  Milito…se mezclen en la misma portada con los de insípidos y desdeñables jugadores. Es una cuestión de principios: respeto y justicia.

La idea era jugar un poco con la historia. Establecer alguna que otra analogía, soñar con algún resultado símil, recordar algunos equipos y futbolistas, situaciones y anécdotas. Se logró en parte: siempre y cuando el equipo del Tolo no saliera a escena a batir todos los récords (negativos, por supuesto).

En unas horas recibiremos a San Lorenzo de Almagro. Un clásico atestado de partidos magnificas. Era la ocasión ideal para recordar la goleada -con vuelta olímpica incluida- del 2002; la final del 63 (¡9-1!) o los batallas victoriosas en las semis de la Libertadores en 1973. Sin embargo, salvo una catástrofe en el Ciclón, nada ni nadie nos asegura que este plantel no nos amargue el día entero, como tantas otras veces.

“La historia es dialéctica, nunca se da en las mismas condiciones ni en los mismos  factores. No se repite sino que es una continuidad”, explicó alguna vez el historiador Felipe Pigna. La aseveración sirve para comprender que esta crisis no es igual que la del 2002. Las personas responsables en su gran mayoría son distintas. Eso sí: la impericia continúa incólume por Avellaneda.

“A iguales causas, iguales efectos.-agregó Pigna- Si no modificamos las causas, los efectos seguramente serán muy parecidos”. La ecuación es simple: en julio de 2003 se trajeron 14 jugadores de relleno e Independiente salió 15to. En Junio de 2009, luego del “escobazo”, el Tolo esperará por ¿ocho refuerzos? u ¿ocho o incorporaciones? Sólo de un término dependerá la felicidad de más de cuatro millones de argentinos. Ya es hora de que este fuego devastador se transforme en aquel fuego sagrado que tanto nos identificó en los archivos de antaño. Ya es hora de volver a ser.

Advertisement
Connect