El capitán de Independiente recibió un golpe muy fuerte en su cabeza y salió a los 24 minutos. Fue trasladado consciente al Hospital Fiorito. Luego en el Itoiz se informó que sufrió un traumatismo con pérdida del conocimiento.
Si había un jugador que no podía faltarle al Rojo era justamente el abanderado de su plantel. Ese que deja todo, que marca el camino, que guía al resto. Y, lamentablemente con 24 minutos de juego en Sarandí, en un partido que ya le era complicado a los de Almirón, recibió un golpe muy fuerte en su cabeza y cayó.
Los médicos rápidamente le colocaron el cuello ortopédico a Federico Mancuello, le sacaron la cinta de capitán y lo llevaron al Hospital Fiorito. El futbolista se fue consciente pero muy dolorido. Los que lo acompañaron fueron Jorge Damiani y Mauro Sergio, el ayudante de campo. Luego fue trasladado al Sanatorio Itoiz en donde le realizaron una tomografía que arrojó como diagnóstico un traumatismo con pérdida del conocimiento.
Ojalá que sólo sea un susto y pronto Mancuello pueda volver a trabajar con sus compañeros. Es realmente necesario para el plantel, pero sobre todas las cosas será motivo de su recuperación espontánea.
