Independiente fue un equipo inconexo y perdió ante un rival que supo en todo momento cómo jugar el encuentro. ¡Mirá!
La derrota sufrida con Colón desnudó las falencias de Independiente, un equipo que nunca terminó de formarse. El Rojo es uno de mitad de cancha para atrás, y es otro hacia adelante. En la línea del fondo, los de Avellaneda lograron una solidez defensiva que, a excepción de las pelotas aéreas (un error a corregir), no comete mayores equivocaciones. Sin embargo, en los últimos metros no logra conectar jugadas que preocupen seriamente al rival.
El problema, está visto, no pasa por una hipotética falta de actitud. Los futbolistas intentaron en todo momento llegar al empate, incluso con el 2-0 fueron por el descuento. Los jugadores eran los primeros que querían ganar, de no ser así, no habrían llegado hasta las Semifinales del certamen. Aún así, cuando la actitud no está acompañada de juego, se hace difícil.
Julio Falcioni improvisó a Gonzalo Asís de mediocampista, cuando el juvenil es lateral por derecha. A la ausencia de Lucas González, hay que sumarle que el entrenador nunca supo completar el ataque. Si bien Sebastián Palacios y Silvio Romero eran dos fijas, el otro extremo siempre fue una duda eterna, por lo que los rivales se avocaron a marcar al Tucu y, ante la falta de pelotas al área, el Chino quedó aislado y tuvo que bajar.
En otras palabras, el Rojo nunca pudo ser un equipo completamente funcional. En el mediocampo, dicho sea de paso, siempre fue un equipo de juego, pero nunca de quite. Adrián Arregui había llegado para cumplir esa labor, pero apenas sumó algunos minutos en contados encuentros, y el Rey de Copas apenas se limitó a distribuir con un mediocampo formado por Lucas Romero, Domingo Blanco y Saltita, todos ellos de juego.
Aún así, el Diablo supo hacerle partido a un Colón que, en la cancha, fue un equipo. El Sabalero supo defenderse, y tuvo a Leonardo Burián que respondió sobradamente en las llegadas de los de Avellaneda. Con más ganas que juego, los jugadores del más grande lograron equilibrar el desarrollo del encuentro, pero no alcanzó para llegar a la Final (en verde, las estadísticas de Independiente).
Lo bueno es que el equipo parece haber encontrado una defensa sólida, y tiene un arquero que responde en las difíciles. Habrá que corregir la falta de marca en la mitad de la cancha, y aceitar mejor el ataque para que le lleguen más pelotas al centrodelantero. Lo positivo es que se vio actitud en los futbolistas, lo cual es la base para poder trabajar y mejorar, pero eso habrá que acompañarlo con juego.
