Para meterse en las semifinales de la Sudamericana, Independiente tuvo que sacarse de encima a dos equipos más que complicados, que son líderes ambos en sus respectivas ligas domésticas. Y eso que el Rojo, en el Apertura, está por el fondo…
Quienes quieran sacarle mérito al equipo de Antonio Mohamed en cuanto a los rivales que viene enfrentando, tendrá que buscar por otro lado, porque para llegar a donde hoy está Independiente, entre los cuatro mejores del certamen, derrotó al puntero uruguayo y al líder colombiano.
El primer partido en la Copa para el Rojo fue ante el campeón local, Argentinos Juniors, que sin embargo llevaba bastante diezmado. Fue victoria 1-0 en la ida en Avellaneda y empate en uno en La Paternal, tras arrancar 0-1 abajo.
En octavos, el rival fue Defensor Sporting, el duro conjunto uruguayo que hace un par de años sacó a Boca de la Libertadores en plena Bombonera. El conjunto violeta, que lidera en el campeonato local con 23 puntos, ganó en Montevideo por la mínima y en el Libertadores se llevó flor de paliza: 4-2 y a otra cosa.
Después fue el turno de Tolima, en cuartos. El conjunto colombiano, que hace años mantiene a los mismos futbolistas, fue un durísimo escollo que sólo se superó por los dos goles de visitante que consiguió el Rojo en Ibagué, ya que la serie se cerró con un 2-2 y un 0-0. Los Pijaos son punteros del Campeonato Postobón con 33 unidades.
¿Y ahora quién se viene? Sí, otro líder y defensor del título: nada menos que la Liga Deportivo Universitaria de Quito…
