El Rojo fue a Córdoba a sellar la clasificación a cuartos de final. Sin embargo, cayó 3-2 luego de ir perdiendo 3-0, y no pudo pasar de ronda. ¡Desastre!
Horrendo, una película de terror. Independiente fue a Córdoba a coronar todo lo bueno que había hecho durante la Copa de la Liga con la clasificación a cuartos de final, pero lejos de eso, rememoró el viejo equipo de Ricardo Zielinski. Sin ganas, sin presión, sin fútbol, sin nada, cayó 3-2 ante Talleres y se quedó afuera.
De arranque, se vieron las intenciones. La T creyó en todo momento en que se podía llevar los tres puntos, y así lo plasmó en el mediocampo. Cortó los circuitos del Rojo, y de ahí, empezó a construir su juego. Sin mucho toque pero profundo, eran más ambiciosos. ¿El Diablo? Apatía total.
Y por esa apatía llegó el 1-0. Sobre el final de la primera parte, Matías Giménez Rojas tenía la posibilidad de dar un pase de gol que ponga 1-0 a la visita, pero lo falló y les facilitó la contra. En la réplica, Julio Buffarini perdió al rival, e Iván Marcone se tuvo que tirar a barrer. De aquel tiro libre, Rodrigo Garro puso 1-0 a Talleres.
Así, entonces, culminó la primera parte. En el complemento, Independiente tenía la obligación de ir por el empate, pero nada de eso ocurrió. El ingreso de Santiago Toloza no alcanzó para despabilar a un equipo dormido, y el local se aprovechó. Por eso, a los 16 minutos, Guido Herrera envió un tiro libre que habilitó a Ramón Sosa. El rival le ganó fácilmente a Joaquín Laso, envió un pase al medio, y fue Valentín Depietri quien sentenció el 2-0. ¡Y eso que se lo habían anulado antes!
Y la pesadilla no terminó ahí. Independiente estaba totalmente desconectado del partido, y la T se hacía un festín. Tal así fue que, siete minutos después, Rodrigo Garro habilitó a Ramón Sosa. El futbolista quedó mano a mano luego del horror de Javier Báez, la picó ante la salida de Rodrigo Rey, y finalizó el encuentro. 3-0.
Quedaban 22 minutos todavía, pero el Rojo ya estaba abatido. Salió a buscar el empate, se encontró con un adversario que lo quiso ganar, y se le quemaron los papeles. Si bien había tiempo, solo hubo un descuento aislado. A los 38 de la segunda mitad, Javier Ruiz habilitó a Alexis Canelo, que remató cruzado y puso el 3-1.
Alexis Canelo y el del honor: el delantero de #Independiente la peleó y marcó el descuento ante #Talleres en la #CopaDeLaLiga 🇦🇷. pic.twitter.com/lM3oRiS7jY
— ESPN Fútbol Argentina (@ESPNFutbolArg) November 26, 2023
De ahí, Independiente mostró algo de vida. Empezó a presionar un poco más, y ya jugaba en campo de Talleres. Es por eso que, a los 43 minutos, Matías Giménez Rojas aprovechó una pelota que quedó boyando en el área, y descontó 3-2.
NO PIERDE LA ESPERANZA: Giménez descontó para el Rojo sobre la hora y Talleres gana 3-2 en la #CopadelaLiga.pic.twitter.com/ktjdiBh6QO
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Pero fue tarde, los jugadores no pudieron hacer en diez minutos lo que no habían hecho los ochenta anteriores. Por eso, cuando Hernán Mastrángelo pitó el final, el Diablo se quedó afuera. Necesitaba un empate nada más, y lo entendieron así: cedieron la pelota, levantaron el pie, y jugaron como si pensaran en las vacaciones. Era un partido clave, y lo jugaron como si fuera un amistoso. Ahora se viene la pretemporada, y hay que trabajar arduamente para armar un plantel que esté a la altura de Independiente.
